¿Sabia que los deportistas profesionales ganan mas en publicidad de las marcas famosas que por hacer deporte?
El Deporte de hoy en día y sobre todo el deporte profesional y de alto
rendimiento, por su gran capacidad de llegar a cientos, miles y millones de
personas, gracias a la penetración y difusión de los grandes medios de
comunicación, se ha convertido en un negocio y una industria que cada año
mueve miles de millones de euros en Europa y de dólares en todo el mundo.
El
deporte como espectáculo tiene la capacidad de paralizar prácticamente al mundo
entero con eventos de gran magnitud, como la final de una Copa Mundial de
Fútbol o una final de 100 metros planos, considerada la prueba reina de los
Juegos Olímpicos, siendo el escenario ideal para promocionar marcas, productos
y servicios, tanto ligados al deporte, como de consumo masivo.
Los
deportistas profesionales y de mayor renombre llegan a ganar en muchos casos
mucho más dinero por concepto de contratos publicitarios que por lo que ganan
en sus contratos como deportistas, lo que muchas veces genera una presión
adicional, por el hecho de mantener un rendimiento y resultados óptimos para de
esta forma cumplir con los patrocinantes o empresas de las cuales son imagen.
Los
atletas llegan a convertirse, no sólo en imagen de productos, marcas o
empresas, sino que se convierten ellos mismos en sus propios productos,
manejados por managers o gerentes deportivos y que de acuerdo al nivel
deportivo y resultados alcanzados tienen un precio o costo, tanto para los
equipos que los pretenden, como para las empresas que les ofrecen contratos
publicitarios.
Toda
esta industria y economía que se mueve en torno al deporte puede llegar a
influir directamente en la actividad deportiva como tal, siendo las empresas,
patrocinantes y organizaciones que dirigen el deporte mundial, las que acuerdan
lo más conveniente para ellos, en decisiones como que modelo y marca de balón
de fútbol se utilizará para un Campeonato o cual es el horario de mayor
audiencia televisiva para realizar un partido, por citar algunos ejemplos,
decisiones influenciadas más allá de los intereses del propio deporte, por los
propios intereses económicos de estas empresas y organizaciones.
El fútbol es sin
lugar a dudas el deporte más popular del planeta, uno de los forjadores de
identidad más potentes del último tiempo. Cada vez son más las personas que se
transforman en hinchas, actores sociales los cuales marcados por la fuerte
identidad que transmite dicho deporte, siguen y apoyan a las instituciones que
practican y desarrollan este pasional deporte. Parte de esta popularidad es
producto del proceso de mercantilización, que, a través de la globalización, ha
introducido al igual que en gran parte de las esferas de nuestra sociedad, la
mercadotecnia y el poder del dinero como eje regular y central de los procesos
sociales. Hoy en día el fútbol no sería el mismo y no tendría el alcance que
tiene si no fuese gracias al poder del dinero y de las
empresas privadas que se mueven en la búsqueda de tal codiciado
capital.
David Beckham
sigue manteniendo todo su potencial comercial a pesar de ser una estrella del
mundo del deporte que se retiró hace ya algunos años. Sin embargo, las firmas
comerciales lo siguen considerando como uno de los principales activos dentro
del mundo del deporte a la hora de promocionar sus marcas. Y buena prueba de
ello es el último acuerdo alcanzado por el ex internacional británico.
David Beckham,
nuevo embajador de Tudor
La firma de
relojes de lujo suiza Tudor ha anunciado hace tan sólo unas horas una
importante alianza dentro del terreno comercial para complementar su estrategia
de marketing que tiene como principal protagonista a David Beckham, al que ha
nombrado nuevo embajador mundial de la compañía.
Como parte de la
nueva alianza, el ex capitán inglés será la cara de la próxima campaña de la
multinacional suiza, “Born To Dare”, diseñada para proyectar los valores de la
compañía, una filial de la marca Rolex. David Becham, de 42 años de edad, es
una de las figuras más reconocidas del deporte mundial. Tras una brillante
carrera futbolística donde disputó más de 500 partidos con el Manchester
United, el Real Madrid, el Paris Saint Germain y Los Angeles Galaxy, el
británico optó por la retirada del deporte profesional en el año 2013.
A pesar de ello,
sigue manteniendo intacta su imagen como icono comercial, lo que le reporta
cada año importantísimas sumas de dinero procedentes de acuerdos comerciales
con las principales marcas comerciales del mundo. Está considerado uno de los
deportistas que mejor rentabilizan su imagen a nivel mundial y tan sólo el gran
Michael Jordan le supera en cuanto ingresos procedentes de sus negocios.
Algunas
consecuencias de la mercantilización del deporte
El deporte
profesional de competición tiene también una consecuencia importante: difunde
socialmente una representación de la vida como una competición de unos contra
otros y sacraliza unos valores individualistas que adquieren más relevancia que
los valores de solidaridad interna que caracterizan a los buenos equipos.
Valores que nunca llegan a ocupar el primer plano en las representaciones
colectivas. Para los chavales de los colegios lo que cuenta es destacar como
“crack”, o sea, el individualismo. No la solidaridad con los demás. Publicita
el deseo de ganar, cuando,
en realidad, se puede perder ganando y ganar perdiendo. El film La soledad del corredor de fondo debería
ser de proyección recomendada en las escuelas que no busquen formar corderos
conformistas.
Sin el ejército
publicitario y político algunas gentes podrían optar. Podrían aceptar que el
deporte como espectáculo es esencialmente infantil, emocional, basto e
infinitamente repetitivo. Que la mayoría de las competiciones son un tostón de
escasa calidad, aunque no falte la emoción por ver quién gana. Y que a fin de
cuentas los sueldos millonarios de los deportistas, los negocios de los clubs y
las lujosas sinecuras viajeras de las autoridades se pagan con el coste por
publicidad incorporado en el de los productos que adquieren con sus salarios, y
también con sus impuestos. El deporte mediático es un producto más de una
sociedad barbarizada. Donde el dominio social se aprovecha de la administración
que despiertan los héroes en las subjetividades, aunque los sujetos se
nieguen a ver que esos héroes, en realidad, se suceden continuamente y que
suelen ser de cartón, a diferencia de los héroes anónimos que padecen por la
defensa de las libertades de todos; de los científicos que aportan con esfuerzo
desinteresado avances de la medicina; o de ellos mismos, verdaderos héroes
cotidianos en su esfuerzo por mantener a sus familias.
Tema 3: Ousmane Diakite
La mercantilización que ha sufrido el deporte moderno ha desarrollado un mercado de marcas y productos deportivos consumidos por una gran masa social. Los deportistas ingresan más dinero por los contratos publicitarios que por la práctica deportiva que realizan.
ResponderEliminarEso convertió el deporte como un mercado y no simplemente una práctica para sus aspectos sociales, de salud, y su aspecto competitivo
Es un tema realmente interesante, y me ayudo a entender mucho sobre la globalizacion del mercadeo deportivo.
ResponderEliminarHoy en dia la mercatilizacion tiene mas efecto en el deporte que la misma practica y se anota en este tema quelos atletas profesionales ganan mucho en publicidad.
ResponderEliminarEs un tema muy interesante y capital para el mondo deportivo, sobre todo en este siglo 21 donde la el deporte y el comercio internacional y marketing esta ligado. Gracias!
ResponderEliminarLa mercantilizacion del deporte a traves del mundo hizo que los grandes imprezarios invertiera en este ambito y eso creyo mucho competencia etre los los clubles que juegan las ligas profesionales. De echo los clubles contratan mas a los jugadores buenos en marketing y publicidad que a los que juegan mucho.
ResponderEliminar